Una mujer en Miami se detuvo en una gasolinera para echar combustible y dos ladrones se subieron a su vehículo y huyeron del lugar. Dentro del carro estaban sus dos hijos, de tres y siete años, junto a la abuela.
La policía pudo dar con ellos gracias a la ubicación del teléfono celular que se quedó dentro del carro.
Hasta el momento la policía no ha confirmado si los ladrones fueron arrestados pero el padre de los niños explicó que el hijo mayor dio una descripción detallada del rostro de los mismos.